La nota más alegre la ponían las actividades que se realizaban los domingos en nuestra Ermita. Estas actividades eran muy variadas:
- Se hacían comidas colectivas, donde las hermanas les enseñaban canciones, preparaban teatros y muchas otras actividades lúdicas que requerían la participación de todos.
- También buscaban las ayudas necesarias para obtener el transporte para llevar a las niñas a la playa. Este era el viaje que hacían con mayor ilusión debido a que ellas no tenían los medios necesarios.